La empresa prestadora del servicio en el conurbano bonaerense y la Ciudad de Buenos Aires emitió un comunicado luego del informe difundido por el ITBA en los últimos días que alertaba sobre altos niveles de arsénico en municipios bonaerenses.
El agua es fundamental. Su calidad, aún más. Y cuando se descubre que hay una situación problemática con los niveles de arsénico en algunas zonas del Área Metropolitana Buenos Aires (AMBA), la respuesta de las autoridades es esencial.
En este contexto, AySA (Administración de Servicios de Jardín y Agua) lanzó un comunicado. Un informe anterior sobre altos niveles de arsénico en municipios bonaerenses había sido hecho público por el ITBA (Instituto de Tecnología de Buenos Aires).
La respuesta de AySA fue calmar los ánimos, asegurando que la situación está siendo monitoreada y abordada con medidas necesarias para garantizar la seguridad del agua potable.
El mensaje oficial se centró en las acciones que ya están siendo implementadas. Se mencionaron proyectos y estrategias a corto plazo para mejorar la calidad del agua, incluyendo la inversión en nuevas tecnologías de tratamiento.
Medidas Progresivas
AySA destacó su compromiso con la seguridad del agua potable. Al mismo tiempo, se hizo hincapié en la necesidad de colaboración entre las autoridades locales y el gobierno nacional para abordar este desafío.
La comunicación enfatizó que la calidad del agua es fundamental para la salud pública y que todas las medidas están siendo tomadas con este objetivo en mente. Se prometió transparencia y seguimiento constante de los niveles de arsénico, asegurando que se mantenga un nivel aceptable.
En resumen, el comunicado de AySA fue calmo pero firme. Reafirmó la importancia del agua potable para la comunidad y los esfuerzos por garantizar su calidad. Se invitó a los ciudadanos a mantenerse informados sobre las acciones que se están llevando a cabo para proteger el bienestar general.
La situación con respecto al arsénico en el agua del AMBA sigue siendo un tema de atención y preocupación. La respuesta de AySA, si bien no anula la preocupación por la calidad del agua, muestra disposición para abordar las cuestiones planteadas y garantizar que se mantenga una situación controlada.