El Gobierno decidió no aumentar los boletos de los trenes y colectivos del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) durante los próximos seis meses. Del mismo modo, también se congelarán, por un plazo de cuatro meses, los subsidios estatales al transporte.
Mientras tanto, el Gobierno revisará el esquema tarifario actual del transporte público en Capital y Gran Buenos Aires. La medida afecta a unas 10 millones de personas que usan el transporte todos los días, a menudo para concurrir a sus lugares de trabajo o de estudio.
El planteo se inscribe en la promesa de "desdolarizar las tarifas", que por otra parte desde marzo no aumentaban. Con posterioridad a las PASO del 11 de agosto y ante el escenario de derrota electoral del oficialismo de entonces, Mauricio Macri había frenado el último aumento programado y había aumentado los subsidios. Según el Ministerio de Transporte, en la actualidad el Estado financia el 60% del boleto de colectivo y el 90% de los boletos de los trenes. Para los pasajeros que tienen que hacer más de un viaje para llegar a destino, los valores del transporte no son siempre iguales debido a la Red SUBE, que establece que el segundo viaje cuesta un 50 por ciento del primero y el tercero un 50 por ciento del segundo, siempre y cuando dichos viajes se hagan en un lapso no mayor de dos horas.